Existe una vieja leyenda que habla de la magia de la poesía: al parecer todos los poemas creados por poetas de todos los tiempos se reúnen en una pequeña playa custodiada por un luminoso faro en el que habita un viejo farero que nació hace algunos siglos ya. Los poemas constituyen su alimento y se dice que ,en realidad, el farero es el "alma de la poesía", por lo que mientras se escriban poemas no morirá nunca.
El farero se sentía feliz contemplando aquellos poemas que sin ser suyos, él así los consideraba . Sin embargo, había uno que le perturbaba insistentemente:
Al cabo comprendió que sería injusto que solo él disfrutara de aquellas imágenes y de esas palabras, por lo que decidió depositarlas en la arena de la playa para que, cabalgando en olas de algas y espuma, viajaran lejos muy lejos...
¡Tanto como la imaginación!.
Durante días estuvo prepando el viaje y para ello fue recogiendo botellas, versos y estrellas con los que hizo acompañar a los poemas en su partida...
…pongo estos seis versos en mi botella al mar con el deseo de que quien los recoja sepa que los sueños son ilusiones, deseos de un mundo de felicidad, de libertad.
Siempre se suele creer que nada de lo que se sueña se puede hacer realidad pero en esta vida, a veces por desgracia, otras veces por suerte todo es posible y todo se puede cambiar, por lo que nuca hay que dejar de soñar
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